Ir al contenido principal

Argentina vs Islandia: Casi, pero no y "El Diego lo hacía"

Casi, pero no

Debut de Argentina e Islandia. El primero con la presión que acumula desde el Mundial de Brasil, el otro con la presión de jugar contra uno de los mejores equipos del mundo.
Islandia tuvo un plan táctico el cual cumplió los 90 minutos y le permitió que la selección albiceleste (hoy con camiseta negra) no pueda llevarse los tres puntos. Hallgrímsson diseño en su equipo una defensa de 11 jugadores que atacaban en contraataque con pelotazos largos a los delanteros para que superen la defensa argentina con potencia física.
Destacar lo difícil que es conseguir mantener ese esquema todo el partido.
Argentina por su parte, se vió sorprendida por el plan de su rival y , si bien se adelantó en el marcador con un buen desmarque de Agüero y fuerte disparo a los 19 minutos, no pudo romper el bloque defensivo.
El empate islandés llegó a los 22 minutos con un error defensivo argentino, que se repitió varias veces en el partido. Biglia no tuvo la capacidad de detener el contraataque y Rojo fue incapaz de ganar físicamente a sus rivales.
A los 63 minutos Messi tuvo en sus pies la posibilidad de adelantarse en el resultado, mediante un penal. El cual quedó en las manos del arquero
Halldórsson.

Le faltó dinamismo y profundidad al equipo de Sampaoli para poder llevarse la victoria, para Islandia fue un partido perfecto.
Se deberá seguir trabajando reforzar los puntos flojos de la defensa y lograr concretar y ser más aplastantes a la hora del ataque.

Sera
Argentina e Islandia igualaron 1 a 1. El conjunto de Sampaoli no pudo romper el esquema defensivo de los islandeses.






“EL DIEGO LO HACÍA”

Quizás un rasgo a resaltar del argentino promedio es la simpleza con la que compara situaciones, aspectos o personas como si fueran cosas.
El penal errado de Messi, habla de ese inconsciente nacional y del exitismo racional.
La Argentina promedio del Mundial es nacionalista cada 4 años, ve fútbol cada 4 años, inventa canciones, consignas, poemas; compra bandera, gorro y vincha a un vendedor callejero a quien ahora ve como un trabajador de la economía popular y no como un vago o un “busca”. Los niños y niñas pintados, la familia unida, el mate con facturas, el “buen día” y persignarse cuando el equipo saca del medio; la grieta nacional se cierra en una suerte de patrioterismo: patria y patoterismo.
Con la ilusión llega el ocultamiento de las frustraciones personales volcadas a la redonda. Con el fracaso llega la frustración oculta a imponerse frente a la pelota.
Messi, un apellido de esos con raíz en Europa, apellido en el que se embandera el argentino promedio (como siempre existe un “pero”), pero cuando le conviene:
Cuando lo asemeja a Maradona, pero “Maradona es drogadicto y villero” antes del partido.
Pero cuando el referí no señala la mitad del campo luego de la ejecución del penal, que Messi se suba al barco y que se pegue la vuelta a Europa que “allá juega por la guita contra nadie”. Ahora el argentino promedio se da vuelta, pero “El Diego lo hacía”.
De héroe a villano en un segundo, de Messías a pecho frío.
El argentino promedio se relame ante el fracaso ajeno. Ve la oportunidad de sentirse grande entre perdedores, puede incluso gritarle fracasado a un pibe de 20 y tantos que ya tiene la vida resuelta sin problemas de alimentación, vivienda, trabajo, coche, que incluso ni madruga y se toma el transporte público saturadísimo.
Pero se da el lujo ante el fracaso, repite la fatídica mediática del “pecho frío” al mejor jugador del equipo, al que hasta hace instantes era “la esperanza”.
Así se construye el sentido común del Mundial, desde el discurso cipayo del comentarista “acá los horarios se cumplen y no estamos acostumbrados”, al “Messi quédate en Europa”; esa duda existencial del argentino promedio que en busca de su identidad le dijo “negro de mierda” al vendedor de banderas cuando el arquero atajó el penal y se acordó de su realidad mediocre de cumplir horarios sin que lo muestren las cámaras 4K ultra HD.

Mesh



Comentarios

Entradas populares de este blog

El fantasma del 98 (Colombia en el Mundial)

En la imagen Beckam sepulta las ilusiones de una selección que no concibe la derrota. ¿Qué ha sucedido con Colombia en su debut? ¿Podremos salir de esta situación tan increíblemente compleja? ¿Cómo la selección Colombia puede cambiar la cara de derrota que ha dejado con Japón y volver a construir una selección legendaria? Acompáñenme en este viaje por la furia generada por el partido del día de hoy. Referencias:  La historia de Colombia en el mundial de Francia 98

Costa Rica vs. Brasil: Nadar para morir en la orilla

Los ticos a preparar maletas de regreso, no hay más allá Segunda presentación de Costa Rica en el Mundial ante una de las selecciones que se presentó en Rusia como candidata al título, la todopoderosa y múltiple veces campeona Brasil, así lo respaldaban prensa, aficiones, propios y extraños. Juego difícil para los ticos, ya en el primer partido contra Serbia se había visto que el equipo distaba mucho de aquella competitiva selección que hacía cuatro años cosechó aplausos por su desempeño. La historia ahora era otra, el planteamiento que hizo el director técnico fue muy defensivo pero acorde a las condiciones que la selección tica tiene hoy por hoy, así la idea fue aguantar a los brasileños esperando aprovechar los pocos espacios que concedían para buscar el milagro. Pocas veces se logró este objetivo y en el primer tiempo Borges tuvo una ocasión inmejorable que desaprovechó, oportunidad de oro que ante una selección de primer nivel como la brasileña no se puede perdonar. A pe...

Las cuatro principales razones por la que España ha sido eliminada*

Se acabó el Mundial para España  y la frase más repetida es  "se veía venir"  y no le falta razón a los que la han pronunciado porque el campeonato de España ha sido malo, muy malo y en todos los sentidos.  Una sola victoria en cuatro partidos -y de rebote- es el bagaje de esta selección que ha recibido un golpe tan justo como duro.  Pero ¿Quién es el culpable? culpar a una sola persona sería injusto porque todos tienen parte de culpa, lo que si podemos hacer es  analizar lo que ha pasado  para sacar conclusiones: Hierro, un entrenador improvisado que no pudo hacer jugar a la "La Roja" Es uno de los señalados, pero  el que menos culpa tiene . Hierro cogió los mandos del equipo a dos días del debut y le tocó el marrón de  entrenar a un equipo que no era el suyo -lo hizo  Lopetegui - y hacerle jugar de una forma que no era la que llevaban dos años haciendo.  Quiso dejar las cosas sin cambiar pero eso e...